El buen trabajo del técnico Toba, consiguiendo en ascenso del equipo carbayon a primera división, motivo que la directiva renovase su confianza en él de cara al regreso del equipo azulón a la élite del fútbol español. Y es que el Oviedo llevaba siete temporadas sin jugar en 1ª división.
En la temporada del regreso no solo el equipo se mantuvo dignamente en la categoría, quedando en decimosegunda posición sumando treinta puntos, sino que aportó al fútbol español al máximo goleador de la temporada, ya que Marianin se hizo con el galardón tras hacer 20 goles en los 34 partidos disputados.
El once tipo del Real Oviedo esa temporada era el formado por Lombardía, Carrete, Tensi, Enrique, Iriarte, Chuso, Javier , Bravo, Marianin, Uría y el paraguayo Jacquet fichado esa misma temporada del At. de Madrid.
Con los normales altibajos de un equipo recién ascendido a la categoría el Oviedo ofreció muy buenas tardes de fútbol en el estadio Carlos Tartiere, la irregularidad en diferentes tramos de la temporada le costo el puesto al técnico del ascenso Toba, en su lugar tomo las riendas del equipo Sabino Barinaga.
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