En esta semana en la que tanto se a hablado del equipo bávaro, tras el reciente fichaje de Pep Guardiola hace un mes y el serio correctivo que a infligido al F.C. Barcelona, quiero recordar las cuatro copas de Europa que conquisto el Bayern, tres de ellas logradas de forma consecutiva en las temporadas 1973/74, 74/75 y 75/76, repitiendo el logro que había cosechado, en las tres temporadas anteriores, el Ajax de Amsterdam de Cruyff y Neeskens. Su última Copa de Europa la consiguió en la temporada 2000/01 tras vencer en la final al Valencia CF.
Coincidiendo con la salida de Cruyff del Ajax, tras su fichaje por el F.C. Barcelona, el Bayern comenzaba, la que sería su época más gloriosa en Europa.
La temporada 73/74 no fue un camino de rosas precisamente, donde paso muchos apuros para poder eliminar al equipo sueco del Atvidaberg en Dieciseisavos de final, al que elimino en la tanda de penaltis por 4-3.
La ronda de octavos de final trajo un duelo fratricida entre los de Munich y sus vecinos orientales del Dinamo Dresden, con la actuación providencial de Gerd Müller (máximo realizador de esa edición del torneo, con ocho goles) en ambos partidos, logrando el gol de la victoria en la ida por 4-3 y el del empate final 3-3 en la vuelta.
En cuartos de final, Torstensson ya podía empezar a jugar en Copa de Europa, y eso pareció notarlo el equipo, que eliminó sin serias dificultades al CSKA Sofia por un global en la eliminatoria de 5 a 3. Torstensson (2), Beckembauer y Muller fueron los goleadores en la ida. En Sofía, Breitner marco de penalti para los alemanes.
En semifinales vencería al sorprendente equipo húngaro del Újpesti, en el Nepstadion de Dozsa empataria a 1-1 con gol de Torstensson y la vuelta en el Olympiastadion, vencerían con goles de Torstenssson, Horváth y Müller por 3-0, dejando la eliminatoria en un 4 a 1 final.
Atlético de Madrid y Bayern se citan en la gran final, por primera vez en 19 años de existencia de la competición los dos lograban clasificarse para la final. El estadio de Heysel seria el escenario de esta gran final. Fue una final intensa, tremendamente disputada, entre dos equipos que mostraron un altísimo nivel durante los 120 minutos que duro el encuentro. Un gol de falta directa de Luis Aragonés, ponía a los colchoneros por delante a falta de seis minutos para finalizar la prorroga, pero un inesperado gol de Scwarzebeck forzaría el partido de desempate en los últimos instantes del partido, dejando el resultado en 1-1.
Tras la decepción sufrida en el primer partido por el At. de Madrid, el equipo colchonero no acudió al encuentro con el estado anímico muy bien, de ello se supo aprovechar el Bayern que desde el comienzo del encuentro paso por encima de los rojiblancos, 4-0 fue el resultado final con goles de Hoeness en dos ocasiones y Müller, al igual que su compañero. Müller acabaría siendo el máximo realizador del torneo con 8 goles.
La última Copa de Europa de esta generación de jugadores sería la más plácida de las tres en la temporada 75/76, puesto que el Bayern de Munich sólo sufrió en segunda ronda, contra el Malmoe sueco, cuando tuvieron que remontar en la vuelta el 1 a 0 de la ida, y lo hicieron ganando 2 a 0, con goles de Dürnberger y Torstensson. Anteriormente, habían aplastado por un global de 1 a 8 al Jeunesse Esch de Luxemburgo, y su trayecto continuó con la holgada eliminación del Benfica en cuartos por un global de 1 a 5, y la algó más complicada eliminación del Real Madrid en semifinales, tras empatar a uno en el Bernabéu, pero sentenciar en la vuelta con dos goles de Müller cuando sólo se llevaba media hora de partido.
En la final contra el Saint-Étienne, contarían con la suerte como aliada, puesto que Bathenay y el gran Jacques Santini lanzaron el balón al poste para los franceses en la primera parte, y Roth anotaría el único tanto del partido en el minuto cincuenta y siete.
Fue en la temporada 2000/01, se celebraba la 46.ª edición en la historia de la competición. Se disputó entre julio de 2000 y mayo de 2001, con la participación inicial de 72 equipos, representantes de 48 federaciones nacionales diferentes.
Reportaje del programa Fiebre Maldini de aquella final.
Coincidiendo con la salida de Cruyff del Ajax, tras su fichaje por el F.C. Barcelona, el Bayern comenzaba, la que sería su época más gloriosa en Europa.
La temporada 73/74 no fue un camino de rosas precisamente, donde paso muchos apuros para poder eliminar al equipo sueco del Atvidaberg en Dieciseisavos de final, al que elimino en la tanda de penaltis por 4-3.
La ronda de octavos de final trajo un duelo fratricida entre los de Munich y sus vecinos orientales del Dinamo Dresden, con la actuación providencial de Gerd Müller (máximo realizador de esa edición del torneo, con ocho goles) en ambos partidos, logrando el gol de la victoria en la ida por 4-3 y el del empate final 3-3 en la vuelta.
En cuartos de final, Torstensson ya podía empezar a jugar en Copa de Europa, y eso pareció notarlo el equipo, que eliminó sin serias dificultades al CSKA Sofia por un global en la eliminatoria de 5 a 3. Torstensson (2), Beckembauer y Muller fueron los goleadores en la ida. En Sofía, Breitner marco de penalti para los alemanes.
En semifinales vencería al sorprendente equipo húngaro del Újpesti, en el Nepstadion de Dozsa empataria a 1-1 con gol de Torstensson y la vuelta en el Olympiastadion, vencerían con goles de Torstenssson, Horváth y Müller por 3-0, dejando la eliminatoria en un 4 a 1 final.
Gol de Scwarzebeck |
Atlético de Madrid y Bayern se citan en la gran final, por primera vez en 19 años de existencia de la competición los dos lograban clasificarse para la final. El estadio de Heysel seria el escenario de esta gran final. Fue una final intensa, tremendamente disputada, entre dos equipos que mostraron un altísimo nivel durante los 120 minutos que duro el encuentro. Un gol de falta directa de Luis Aragonés, ponía a los colchoneros por delante a falta de seis minutos para finalizar la prorroga, pero un inesperado gol de Scwarzebeck forzaría el partido de desempate en los últimos instantes del partido, dejando el resultado en 1-1.
Tras la decepción sufrida en el primer partido por el At. de Madrid, el equipo colchonero no acudió al encuentro con el estado anímico muy bien, de ello se supo aprovechar el Bayern que desde el comienzo del encuentro paso por encima de los rojiblancos, 4-0 fue el resultado final con goles de Hoeness en dos ocasiones y Müller, al igual que su compañero. Müller acabaría siendo el máximo realizador del torneo con 8 goles.
La temporada 1974/75, se complementó la plantilla con el defensa Björn Andersson y otro futbolista mítico, Karl-Heinz Rummenigge, y el equipo fue avanzando rondas sin hacer un fútbol muy vistoso, pero resultando fulminantemente efectivos. Hubo otro enfrentamiento fratricida, esta vez con el Magdeburgo, con ajustada victorias por 3 a 2 y 1 a 2, y un Müller nuevamente estelar marcando dos goles tanto en la ida como en la vuelta. En cuartos de final eliminaron al armenio Ararat Yerevan ganando 2 a 0 en casa, y perdiendo 1 a 0 fuera, y en semifinales cayó el Saint-Étienne al empatar a cero en territorio francés, y ganar 2 a 0 en Munich, en otra eliminatoria poco brillante.
El último rival fue el Leeds United, que venía de barrer al Anderlecht por un global de 4 a 0 y dejar en la cuneta al Barça de Cruyff y Neeskens, en una de las finales de Copa de Europa más polémicas de la historia.
Primero por la brutalidad de los jugadores ingleses, que a los cuatro minutos de partido habían destrozado la pierna de Andersson con una entrada del centrocampista Yorath (en lo que Uli Hoeness definió años más tarde como “la entrada más brutal que he visto en mi vida”), y en el minuto cuarenta y dos era el propio Hoeness el que sufrió una entrada salvaje del lateral Frank Gray, quedando su rodilla tan maltrecha que nunca se recuperaría de esta lesión, y se vería forzado a retirarse a los veintisiete años.
El otro aspecto polémico fue el arbitraje, puesto que el colegiado francés, Michel Kitabdijan, no señaló dos penaltis flagrantes de Beckenbauer, el primero con la mano y el segundo por derribo dentro del área, y en la segunda parte anuló un gol legal al Leeds por fuera de juego posicional de otro jugador, después de dar Kitabdijan el gol como válido y desdecirse cuando Beckenbauer le pidió que fuera a hablar con el linier, hecho que desencadenó un sinfin de incidentes violentos en la grada inglesa, y que obligó a parar el partido durante un buen rato. Con los ánimos tan caldeados, la experiencia y serenidad de los alemanes se impuso a la rabia y desespero de los ingleses, marcando Franz Roth y Müller en los últimos veinte minutos, y dejando así un 2 a 0 en el marcador que ya no se movería.
Una victoria que no vivió en el banquillo Udo Lattek, entrenador del equipo desde 1970, puesto que el mal papel del conjunto alemán en la Bundesliga le había pasado factura, siendo reemplazado por Dettmar Cramer, recomendado por Beckenbauer, a media temporada. Y Müller repetiría como máximo goleador del campeonato, logro compartido con Eduard Markarov, del Ararat Yerevan, ambos con cinco goles.
El último rival fue el Leeds United, que venía de barrer al Anderlecht por un global de 4 a 0 y dejar en la cuneta al Barça de Cruyff y Neeskens, en una de las finales de Copa de Europa más polémicas de la historia.
Primero por la brutalidad de los jugadores ingleses, que a los cuatro minutos de partido habían destrozado la pierna de Andersson con una entrada del centrocampista Yorath (en lo que Uli Hoeness definió años más tarde como “la entrada más brutal que he visto en mi vida”), y en el minuto cuarenta y dos era el propio Hoeness el que sufrió una entrada salvaje del lateral Frank Gray, quedando su rodilla tan maltrecha que nunca se recuperaría de esta lesión, y se vería forzado a retirarse a los veintisiete años.
Múller marcando el 2-0 final |
Una victoria que no vivió en el banquillo Udo Lattek, entrenador del equipo desde 1970, puesto que el mal papel del conjunto alemán en la Bundesliga le había pasado factura, siendo reemplazado por Dettmar Cramer, recomendado por Beckenbauer, a media temporada. Y Müller repetiría como máximo goleador del campeonato, logro compartido con Eduard Markarov, del Ararat Yerevan, ambos con cinco goles.
La última Copa de Europa de esta generación de jugadores sería la más plácida de las tres en la temporada 75/76, puesto que el Bayern de Munich sólo sufrió en segunda ronda, contra el Malmoe sueco, cuando tuvieron que remontar en la vuelta el 1 a 0 de la ida, y lo hicieron ganando 2 a 0, con goles de Dürnberger y Torstensson. Anteriormente, habían aplastado por un global de 1 a 8 al Jeunesse Esch de Luxemburgo, y su trayecto continuó con la holgada eliminación del Benfica en cuartos por un global de 1 a 5, y la algó más complicada eliminación del Real Madrid en semifinales, tras empatar a uno en el Bernabéu, pero sentenciar en la vuelta con dos goles de Müller cuando sólo se llevaba media hora de partido.
En la final contra el Saint-Étienne, contarían con la suerte como aliada, puesto que Bathenay y el gran Jacques Santini lanzaron el balón al poste para los franceses en la primera parte, y Roth anotaría el único tanto del partido en el minuto cincuenta y siete.
Gol de Roth en la final, ante el Saint Etienne |
Ese año, 1976, terminaría felizmente para el Bayern de Munich, conquistando su primera Copa Intercontinental al vencer al Cruzeiro, pero al año siguiente, 1977, empezaría el desmantelamiento de la plantilla, sobretodo con la partida de su capitán, líder y referencia, Franz Beckenbauer, al New York Cosmos para ganar millones de dólares, y las sucesivas marchas de Conny Torstensson y Björn Andersson al final de esa misma temporada, del mejor delantero de su historia, Gerd Müller, en 1979, y la retirada de Uli Hoeness (1979), el portero Sapp Meier (1980), y Franz Roth (1981).
Posteriormente, a nivel europeo, el Bayern de Munich llegó a jugar tres finales más en 1982, 1987 y 1999 (su recordadísima debacle en el Camp Nou contra el Manchester United) y conquistó una UEFA en 1996, pero tardaría veinticinco años en conquistar su cuarta Copa de Europa, y su segunda Intercontinental.
La final, a partido único, tuvo lugar el 23 de mayo de 2001 en el estadio Giuseppe Meazza de Milán, en Italia, y en ella se enfrentaron el Bayern Munich, quien venía de eliminar al vigente campeón Real Madrid en semifinales, y el Valencia CF. Venció el conjunto bávaro en la tanda de penaltis por 5-4 después de llegar con empate a un tanto en los 90 minutos reglamentarios como en la prórroga, siendo éste su cuarto entorchado europeo. El equipo valenciano, que llegaba a su segunda final consecutiva se quedaba así otra vez sin el triunfo.
Gaizka Mendieta logró el gol más rápido en las finales de Copa de Europa cuando a los tres minutos del inicio, transformó un lanzamiento de penalti.
El club valencianista comenzó mejor que el alemán, y todo indicaba que por fin se lograría el título. Pero el Bayern Munich poco a poco fue imponiendo su mejor condición física y empató, mediante un transformado de penati por Stefan Effenberg que decidió tirar el segundo penalti pitado a favor de los alemanes, tras errar Scholl el primero, llevando el encuentro a la tanda de penaltis. En la tanda ambos porteros Oliver Kahn y Santiago Cañizares estuvieron muy acertados, pero la fortuna cayó del lado del Bayern cuando el guardameta alemán detuvo el lanzamiento decisivo de Mauricio Pellegrino.
Gráfico lanzadores en la tanda de penaltis |
El ganador de esta edición disputó la Copa Intercontinental 2001 frente al club argentino Boca Juniors, campeón de la Copa Libertadores 2001.
El Bayer intentara romper esta temporada, la mala racha que tiene desde que gano su última final haya por el 2001, esta será su tercera final desde esa fecha, antes Inter de Milán y Chelsea la temporada pasada le privaron de la victoria, y es que el equipo bávaro se ha mostrado en los últimos 14 años como el equipo que más veces a logrado disputar la final, con esta serán 5 finales, habiendo conseguido solo una de las cuatro jugadas.
Bayern München 2012/13 |
El equipo dirigido por Jupp Heynckes, se a mostrado intratable en esta competición hasta la fecha, ha conocido la tristeza de la derrota cuando la gloria estaba cerca la temporada pasada.
Es un grupo que lleva varias temporadas compitiendo juntos, si por algo esta marcado este club es por la ausencia de insustituibles, ningún jugador top en el equipo y mucha profundidad de banquillo, dominio del juego de banda, laterales muy ofensivos con Alaba y Lahn, mucho músculo en el centro del campo con Schweinsteiger y Javi Martínez y una delantera temible por su lucha y velocidad con Ribery, Robben y Mandzukic, además de lo que tiene el el banquillo.
En definitiva un equipo donde las individualidades cumplen con las obligaciones colectivas, una metodología de trabajo en la que cada año se rastrea el mercado alemán y europeo, si hace falta, para fichar a uno o dos jugadores que aporten algo al equipo como titulares y así incrementar la competencia interna en el vestuario.
Con todas estas mimbres no se garantizan títulos al menos a nivel europeo, ya que en el nacional es un claro dominador de los últimos años, pero si a tener opción de poder llegar a finales, veremos si en esta pueden superar al sorprendente Borussia Dortmund.